1.Antes de guardar la ropa, es importante lavarla. Si se trata de abrigos, trajes o prendas delicadas sería conveniente limpiarlas en seco en la tintorería.
2. Para embalar la ropa se pueden utilizar cajas de cartón o de plástico, bolsas de cierre hermético y perchas resistentes de madera o plástico.
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3. Las cajas protegerán la ropa del polvo y las polillas, encargados de dañar los tejidos. Paracombatir las polillas también se puede introducir en la caja un saquito de lavanda, clavos de olor o cedro entre otros como repelente y a la vez, como perfume.
4. La ropa de piel es mucho más delicada y se debe guardar en fundas de tela, que permiten respirar a la piel evitando que se estropee.
5. Las prendas largas (trajes, pantalones, vestidos) es recomendable protegerlas con fundas y no doblarlas.
6. El resto de la ropa se debe doblar bien y guardarla en cajas, hecho que permitirá aumentar el espacio y su buen manejo.
7. Con referencia al calzado, es aconsejable introducir cada modelo en una caja o bolsa individual, habiéndolos limpiado previamente.
8. Es recomendable colocar una etiqueta en la parte exterior de las cajas para poder identificar el contenido de cada una de ellas.
Con información de EFE y AP
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